Hace mucho que escribo. Me he dejado abandonar... me he dejado sentir la mas asquerosa persona del planeta. Ya no me importa engordar, mi ánimo se ha ido, mis ganas estan estáticas... Ahora me miro al espejo y me doy cuenta de lo que soy...no soy nada ni tengo nada.

Este fin de semana, mis mejores amigas me hicieron un alto. Me dijeron de que estaba actuando mal y que las cosas malas que tengo deberian ser un paso para cambiar mi actitud. No entiendo nada, no quiero entender. Me pongo a pensar en mi familia, y todo vuelve a suceder. Es como un circulo vicioso del que no puedo bajarme, mirar a mi familia es como mirarme a mi. Tan mal estoy?

Laxantes, agua, ejercicio...donde estan?...esta semana lo deje por un momento, no me maté de hambre porque se me dio LA GANA de comer, y comer mas de lo que puedo pedir. La gula se apoderó de mi y me hizo sentirme nada, los ánimos de mis amigas ayudaron a que mi estado sucumba ante el delicioso sabor de la comida atorada en mi estómago.

Los gritos de mi madre ayudaron a que mi corazón estalle de dolor, y la indiferencia de mi enamorado ayudó a que mi rumbo perdido, encuentre lugar de refugio en la cólera, el odio y la depresion.

Ya no puedo mas, quiero ser otra, quiero ser yo. Esta no he sido yo, esta es la que en un momento aparece para decir que todo lo malo que tengo es eterno y no controlable.

Y yo me quiero controlar. Yo amo a mi familia, pero no a mi cuerpo. A ese lo repudio y lo repudiaré siempre que no logre mi meta, ese es otro tema. Amo a mi enamorado, y a todos mis amigos. Quiero conservarlos, pero si ellos no me dejan...entonces que mas puedo hacer?

Ya no me queda nada porque sonreir. Solo me queda dormir...dormir y dormir.